Trabajas en un hospital? La vocación de estos profesionales es admirable. Y, precisamente, los trabajadores que más se entregan, son los que más tienden a ignorar los peligros a los que se exponen durante sus tareas. A ti, profesional que desarrolla una labor tan importante en hospitales, te dedicamos estas líneas, recordando que la prevención de accidentes es crucial para tu salud.
Existen numerosos riesgos físicos laborales para el personal de un hospital. ¿Los conoces? En esta ocasión, te traemos algunos de los accidentes más vinculados con el sector hospitalario. Pero, si a pesar de estar advertido, sufrieras alguno de ellos, siempre puedes contar con el apoyo económico de tu seguro de accidentes para que tu recuperación sea mucho más llevadera. En cualquier caso, ¡vamos a ver cuáles son los riesgos a los que puedes enfrentarte cada día en el hospital!
Si trabajas en un hospital corres el riesgo de entrar en contacto con agentes biológicos perjudiciales. La manipulación de pacientes y la cercanía con sangre y todo tipo de excreciones podrían provocarte afecciones cutáneas, infecciones oculares u hospitalarias de naturaleza vírica o bacteriana. La gastroenteritis, la hepatitis, el VIH, o la tuberculosis son solo algunos ejemplos.
Especialmente si trabajas en quirófano estás expuesto a salpicaduras o inhalaciones que pueden tener como origen diferentes elementos: desinfectantes, antibióticos, fragmentos de hueso, fluidos o vidrios por rotura de material, entre otros. Las lesiones que provocadas pueden ir desde una dermatitis en la piel o llegar a ser tan graves como una irritación de las vías respiratorias que te dificulte seriamente la respiración.
La gran carga de trabajo que supone trabajar en un hospital, los turnos que parecen eternos y las horas nocturnas son algunos de los factores que pueden desembocar en riesgos físicos en el trabajo: lumbalgias, síndrome del codo de tenis, síndrome del túnel carpiano o tendinitis, entre otros.
Por otra parte, el enfrentarse con la muerte, prestar apoyo emocional o informar a familiares de enfermedades graves puede provocarte una fatiga mental que te impida mantener un buen estado de ánimo en el trabajo o incluso desembocar en diferentes problemas de salud como ansiedad o depresión.
Afortunadamente, existen medidas de prevención de riesgos laborales en hospitales que puedes seguir para evitar estos accidentes.
Es importante que vigiles si tu hospital dispone de los recursos necesarios y cuenta con los protocolos para prevenir el contacto con agentes biológicos, por ejemplo, mantener alejados a grupos de riesgo como embarazadas.
Entre las medidas que suelen tomarse, podemos destacar dos fundamentales que deberías seguir siempre:
Los hospitales deben seguir unas medidas rigurosas para evitar intoxicaciones, como etiquetar los frascos correctamente. En este caso, también es vital que sigas las instrucciones del hospital, entre las que hay algunas destacables:
El agotamiento físico y mental puede prevenirse tomando medidas protectoras para tu salud:
Los profesionales sanitarios que trabajan en hospitales corren un riesgo especial de sufrir determinados accidentes evitables si se toman las medidas adecuadas. En este post hemos destacado el riesgo de contagios, de intoxicaciones y de agotamiento junto a las precauciones asociadas a cada uno de ellos y que deberías tomar para trabajar de forma más segura. Resumiendo, es fundamental que en el hospital se sigan los protocolos oportunos y que todo el personal los conozca y los aplique.